Sofía ha escrito un cuento

Sofía ha escrito un cuento.

No solo lo ha escrito, sino que lo ha convertido en un libro, uno de esos objetos maravillosos que puedes manejar con las manos, oler, acercar y alejar de los ojos y hasta regalar. Un libro ilustrado.

El cuento trata de un osezno, Tito, que se pasa el día revolcándose en el barro y que apenas se reconoce cuando nada en agua cristalina y se desprende de la carga de barro que llevaba siempre encima.

¿Queréis saber más de Sofía?

Sofía tiene acondroplasia. Le encanta leer, pintar y nadar. Y desde hace un tiempo escribe historias que comparte a veces con amigos y compañeros de clase.

Sofía es la segunda de cuatro hermanos. Ha creado un proyecto dentro de su gran familia llamado Manzana Amarilla para, a través de la creatividad, inventando historias, expresar todo lo que le pasa, todo lo que tiene dentro. Porque el largo proceso de elongación ósea de extremidades (al que a veces se someten los niños con acondroplasia) ha sido muy difícil: dolor, frustración, decepciones, gran esfuerzo.

Le hemos preguntado qué la inspiró a escribir este cuento y nos ha contado que fue una idea de su padre, Manuel, la de crear historias con otros personajes que pudieran expresar sus propios sentimientos y experiencias. Es como poner en otros lo que ella misma vive: la alegría, el dolor, el amor, el miedo…  Como sacarlos fuera de sí, fuera de su pecho. ¡Qué gran idea!

Como Tito, el protagonista de su cuento, Sofía ha tenido que madurar muy rápido para enfrentarse a algo tan difícil como es un proceso de elongación de extremidades. Se ha desprendido de ideas equivocadas, ha perdido amigos, ha crecido por dentro y ahora, tras todo el esfuerzo, ¡tachán!, se ve, no solo, por fin, sin fijadores (¡enhorabuena, Sofía!), sino más sabia, como si ella también se viera a sí misma tras bucear en un lago de aguas limpias.

En la foto la vemos acompañada de su libro ilustrado. ¡Feliz!

Si queréis saber más acerca del libro y de cómo conseguirlo, en su instagram: @manzana.amarilla.mys